La ayuda beneficiaría a más de 550.000 trabajadores que han agotado su prestación contributiva o subsidio entre el 14 de marzo y el 30 de septiembre y no han podido acceder a otras ayudas.
El Real Decreto-ley 24/2020 de 26 de junio, que amplió los ERTE hasta el 30 de septiembre, incluía en sus disposiciones (D.A 4ª) un llamamiento a los agentes sociales para alcanzar una solución al problema de los trabajadores que han agotado su prestación o subsidio por desempleo durante la crisis del covid-19.
Se calcula que más de 550.000 trabajadores han quedado sin protección por desempleo, viendo cómo se iban consumiendo sus prestaciones pero sin tener opciones de encontrar un nuevo trabajo por el estado de alarma, primero, y luego por la paralización generalizada de la actividad económica. Ni tan siquiera los Servicios Públicos de Empleo han podido llevar a cabo sus funciones de formación e intermediación durante meses.
Durante la crisis del covid-19 se ha paralizado el mercado laboral. Muchos trabajadores sin prestaciones o que las han agotado recientemente, no han tenido ni tan siquiera la oportunidad de buscar un empleo y se busca protegerles con un subsidio temporal y excepcional
En un primer momento, la acción del gobierno se centró a proteger a los colectivos directamente más afectados: más de 3,3 millones de trabajadores han recibido la prestación especial por ERTE, y 1,4 millones de autónomos, la prestación por cese de actividad. Además, se crearon subsidios excepcionales, como el de empleadas de hogar, o el de finalización de contrato temporal y se ha puesto en marcha el Ingreso Mínimo Vital.
Sin embargo, muchos trabajadores sin empleo han quedado fuera de los requisitos de acceso a este abanico de ayudas específicas.
En este momento, el gobierno prepara con los agentes sociales (sindicatos y patronal) la puesta en marcha inminente de un nuevo subsidio que cubra estas lagunas de protección.
Estos trabajos se iniciaron el pasado 23 de julio en la Mesa de Diálogo Social y hoy el periódico El País cita las características que tendría esta nueva ayuda:
se está negociando un subsidio extraordinario para los parados que hayan agotado su prestación contributiva o el subsidio entre el 14 de marzo y el 30 de septiembre (unos 550.000), que consistiría en una ayuda de 430 euros mensuales a cobrar durante un trimestre.”
En la misma negociación del gobierno con sindicatos y patronal, también se está tratando la forma de mejorar la protección de los trabajadores con varios contratos a tiempo parcial que se hayan visto afectados por un ERTE y a los que el sistema actual penaliza en exceso al calcular el importe de prestación a cobrar.